domingo, 4 de abril de 2010

La Madrina

Una tarde de invierno me fui con mi ahijada al parque. Su pícara mirada deja ver a años luz todo lo que trama, así que es fácil adivinar lo que maquina su pequeña mente del averno y como le gusta, la gran parte del tiempo, acabar con mi paciencia.


- Aber, tengo pipi
- acabas de hacer pipi en casa!
- pero tengo pipiiiiiii


Entramos en un bar, y en menos de 30 minutos, persiste:


- tengo otra vez pipiiiiiiiiii
- ...
- que me meoooooo
- mira ten, bebe un poco de agua, y así se te pasará



Y después de beberse la botella entera, no volvió a pisar un lavabo hasta pasadas 4 horas. Una malicia de cría cuando se lo propone. Aún así, es la niña de mis ojos, por la única que daría cualquier cosa por verla sonreír. Ayer su madre, osease mi prima mayor, tuvo un gravísimo accidente. Por suerte esta relativamente bien, y puede contarlo aún teniendo la pelvis destrozada. Mi pequeña avernosa se salvo por segundos y evidentemente, no hay lugar en mi cabeza que contemple otra posibilidad que no sea esa.

Se perfectamente, que antes de ir a su casa, traza minuciosamente un plan para que la lleve al parque y le compre chucherías, que estudia todas las maneras habidas y por haber de quitarme el móvil en busca del supuesto novio que me ha inventado, y que calcula las posibilidades que tiene, si se porta bien claro, de que convenza a su madre de que le regale un perro.

Y me encanta, ojalá sea así siempre.








3 comentarios:

A.Blume dijo...

¿Bebiendo agua se pasa el pipí? Yo pensaba que era al revés... xd
En fin, siento mucho lo de tu prima, pero lo importante es pensar que puede contarlo y que tu pequeña avernosa está bien.
Tienes pinta de ser una genial madrina ^^

¡Bienvenida de nuevo! ;)

Hei Jei dijo...

te toca regalarle la mona, que lo sepas

me alegra que tu prima pueda contarlo y de que tú hayas vuelto por estos lares :)

muah!

Nosu dijo...

Por fin has vuelto!
Me encanta la plantilla!

Y que caigas en las redes de la avernosa, es que es inevitable :)

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